Si hidratas las placas de lasaña en agua caliente, vigila que no se te peguen al reservarlas. Para evitarlo, después de hidratarlas, mójalas en agua fría. Así evitarás el problema.
Añade este artículo a tus favoritos
Y tenla a mano siempre que quieras
El truco ha sido copiado
Encuentra la receta que buscas
Te sugerimos...
No encontramos resultados para tu búsqueda.
Verifica la ortografía o prueba con una palabra diferente.
Filtrar
Tiempo
Nivel