Para esta receta de arroz caldoso con pollo y conejo, la relación líquido/arroz que debemos respetar es de entre 2,5 y 3 medidas de líquido por cada medida de arroz (recuerda que es una cuestión de volumen, no de peso).

Por otro lado, no podemos descuidar el sofrito de verduras, pues resultará clave en el resultado final y afectará al caldo. En este sentido, recomendamos añadir los dientes de ajo enteros y el tomate pelado (puedes escaldarlo antes para quitarle la piel con mayor facilidad). También puedes añadir la pulpa de una ñora, pues le dará un punto extra de sabor, color y textura al sofrito.

Por su parte, el tipo de arroz que utilicemos será fundamental. Ten en cuenta que necesitarás un arroz que aguante una cocción lenta y prolongada sin romperse. Por eso, te aconsejamos utilizar un arroz redondo tipo bomba, ya sea de Calasparra, Senia o Albufera. Estos arroces aguantan muy bien la cocción sin pasarse y absorben más cantidad de caldo.

Valora esta receta
Añade este artículo a tus favoritos Y tenla a mano siempre que quieras
El truco ha sido copiado