¡Y también triunfa entre muchos mayores! Está deliciosa tanto fría como caliente y es una opción ideal para llevar cuando vas de excursión a la montaña, a la playa… La receta clásica para prepararla es muy simple: pasas el filete por harina, huevo y pan rallado y lo fríes en aceite bien caliente. A partir de aquí, puedes introducir algunas variantes que convertirán este sencillo plato en algo todavía más rico y sabroso. En esta ocasión te proponemos aromatizar el pan rallado con un poco de perejil y añadir una pastilla de Avecrem caldo de pollo para darle más sabor. También puedes probar a añadirle una mezcla algo más atrevida: queso parmesano rallado y ajo y perejil bien picaditos. ¡El resultado es espectacular!
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