Aprovechar el pan seco

Aprovecha el pan que se ha quedado seco convirtiéndolo en pan rallado. Para ello, utiliza un rallador más o menos grueso, un molinillo de café o simplemente cháfalo envuelto en un paño para obtener una textura granulosa. 

Valora esta receta
Añade este artículo a tus favoritos Y tenla a mano siempre que quieras
El truco ha sido copiado