¿Cuántos comensales?
4
Aceite de oliva virgen extra
Aceite de oliva virgen extra
2 cucharadas
Nuez moscada
Nuez moscada
al gusto
Pimienta blanca
Pimienta blanca
al gusto
Sal
Sal
al gusto
Tomate
Tomate
500 gramos maduro
Polenta
Polenta
500 gramos instantánea
Queso parmesano
Queso parmesano
100 gramos rallado
Nata
Nata
1 cucharada de café
Avecrem Vegetal
1 cubilete
Yema de huevo
Yema de huevo
2 unidades
Azúcar blanco
Azúcar blanco
1 cucharada de café
Orégano
Orégano
al gusto
Sal
Sal
al gusto
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Paso 1 de 3

Mezclamos la polenta en el vaso con 1 litro de agua, sal, pimienta, nuez moscada y las yemas de huevo, 5 minutos, a 90º, velocidad 3. Añade el parmesano rallado y mezcla 1 minuto, a velocidad 6. Pasa a un recipiente plano y deja enfriar, tapado con film para que no coja olor, unas horas en frío.

Paso 2 de 3

Mientras la polenta se enfría, hacemos la salsa. Para ello lava y corta en trozos los tomates. Pícalos en el vaso unos segundos, a velocidad 5. Baja con la espátula y añade el aceite, el azúcar, un poco de sal y orégano. Deja cocer 20 minutos, a 100º, velocidad 2. Añade la nata y deja cocer otros 4 minutos, a 90º, velocidad 2. Tritura 1 minuto, a velocidad 8 para que quede una salsa muy fina. Prepara bolitas de polenta ayudándote de dos cucharillas.

Paso 3 de 3

Pon unos pocos en el plato en el que los vayas a servir, separados entre sí. Cubre con un poco de salsa y, si quieres, queso rallado, y calienta en el microondas unos segundos a máxima potencia. También se pueden gratinar en el horno unos minutos, hasta que se doren. Sirve de inmediato.

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