Si hay un ingrediente que le va de perlas a los espinacas ese es el queso. Como esta verdura tiene un sabor tan intenso y característico, al combinarse con la suavidad del queso hace que la mezcla de ambos sea muy gustosa. Por esta razón, hoy te proponemos elaborar unos crujientes rellenos de queso y espinacas.

Es un entrante ideal para preparar en una comida con familiares o amigos, ya que te harán quedar bien y no te llevarán mucho tiempo. De hecho, pueden parecer complicados de elaborar, pero nada que ver. Sencillamente debes saltear las espinacas con la cebolla y los ajos, y mezclarlas con las nueces y los quesos. Ya solo te quedará montar los crujientes y hornearlos. ¡Os encantarán!

¿Cuántos comensales?
4
Espinaca
Espinaca
400 gramos fresca
Queso cremoso para untar
Queso cremoso para untar
200 gramos
Queso azul
Queso azul
250 gramos
Mantequilla
Mantequilla
80 gramos
Nuez
Nuez
70 gramos pelada
Avecrem Pollo
1 pastilla
Ajo
Ajo
1 diente
Cebolla
Cebolla
1 unidad
Pimienta blanca molida
Pimienta blanca molida
al gusto
Aceite de oliva virgen extra
Aceite de oliva virgen extra
al gusto
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Paso 1 de 4

recipe-step-1

Pela y corta finamente el ajo y la cebolla y dóralos en una cazuela con un chorrito de aceite de oliva. Añade las espinacas limpias y saltéalas brevemente, añadiendo la pastilla de Avecrem Caldo de Pollo desmenuzada. Retíralas de la cazuela y déjalas en un bol.

Paso 2 de 4

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Trocea las nueces y el queso azul y échalos en el bol de las espinacas. Añade el queso cremoso para untar, la pimienta y remueve bien. Desenrolla el paquete de pasta filo, saca una hoja y guarda el resto. Derrite la mantequilla en un cuenco al microondas, pinta con la ayuda de un pincel la pasta filo con la mantequilla.

Paso 3 de 4

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Echa 4 cucharadas del relleno de queso y espinacas en el centro de la pasta filo y enróllala para formar un paquetito. Debes asegurarte de que quede bien cerrado por las puntas para que no se salga el relleno al cocer. Repite la operación 4 veces más para formar los paquetitos.

Paso 4 de 4

En una fuente de horno pon los paquetitos. Píntalos por encima con la mantequilla derretida y cuécelos en el horno a 200 ºC hasta que estén bien crujientes. Sácalos del horno y ya están listos para servir.

Hay muchas formas de combinar el queso y las espinacas en deliciosos entrantes. Otro ejemplo, es el aperitivo de espinacas al roquefort, que se sirve dentro de un panecillo. ¿Apetecibles, verdad?

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