Carne en hojaldre

Comienza calentando aceite en una sartén a fuego medio y agrega la ternera picada. Cocina la carne hasta que esté dorada, asegurándote de deshacer los grumos. A continuación, añade la cebolla picada y cocina hasta que se vuelva transparente. Incorpora los tomates rallados y la pastilla de Avecrem Sabor Carne, removiendo bien. Cocina la mezcla hasta que el líquido se evapore y la mezcla se espese, esto puede tomar unos minutos. Mientras tanto, extiende la masa de hojaldre sobre papel para hornear en una bandeja, dejando espacio para el relleno en el centro. Recuerda que el secreto de las recetas con masa de hojaldre está en tener la masa bien fría para que obtenga una mejor textura al hornear.

Sobre la masa de hojaldre ya extendida, vierte la mezcla de carne en el centro, formando una línea a lo largo de la masa. Añade las lonchas de bacón y el queso para fundir encima de la carne, distribuyéndolos de manera uniforme. Luego, con cuidado, enrolla la masa a partir de un extremo, asegurándote de que el relleno quede bien cerrado dentro. Asegúrate de presionar suavemente los extremos para que no se escape el jugo durante la cocción. Este paso es crucial porque afectará la cocción del hojaldre al horno, así que asegúrate de que todo quede bien integrado.

Una vez que el hojaldre está enrollado y cerrado, es el momento de darle un bonito acabado. Bate un huevo y unta la superficie del hojaldre con ello usando un pincel de cocina. Esto no solo le dará un hermoso color dorado, sino que también ayudará a que quede crujiente. Precalienta el horno a 180°C y coloca la bandeja en el horno ajustando la temperatura y tiempo a la recomendación del envase de la masa, que generalmente es alrededor de 15 a 20 minutos. Mientras horneamos, el calor hará que el hojaldre se expanda y se dore a la perfección.

Una vez que el hojaldre ha estado en el horno durante el tiempo indicado, retíralo y déjalo reposar unos minutos antes de cortarlo. Esto permite que los jugos se asienten y se mantenga la consistencia del relleno. Corta en porciones de aproximadamente 5 cm y sírvelas calientes. Acompaña cada porción con la salsa al roquefort, que complementa perfectamente los sabores de la carne y el bacon. Este plato es ideal tanto para una cena especial como para un almuerzo reconfortante; no olvides disfrutarlo con tus seres queridos.