Pollo relleno deshuesado

Comenzamos la preparación del pollo relleno deshuesado salpimentando la carne picada, que puede ser una mezcla de cerdo y ternera para darle un buen sabor. Después, troceamos finamente el beicon y los orejones, incorporándolos en un bol grande. Añadimos también la mitad de los piñones y removemos bien para que se integren todos los ingredientes. A continuación, batimos un huevo entero y lo vertemos sobre la mezcla, asegurándonos de que todo queda bien amalgamado para que nuestro relleno tenga una textura uniforme al cocinarlo, y así disfrutar de un delicioso pollo relleno deshuesado.

Ahora que tenemos el relleno listo, procedemos a extenderlo sobre la carne del pollo deshuesado. Es importante dejar un lateral del pollo sin rellenar, ya que esto facilitará el proceso de enrollarlo. Una vez extendido, comenzamos a enrollar el pollo cuidadosamente, aplicando una presión moderada para que el relleno no se escape. Utilizamos hilo de cocina para atar firmemente el pollo, asegurándonos de que quede bien sellado. Esto es crucial para que durante la cocción, el pollo relleno deshuesado mantenga su forma y el delicioso relleno se quede en su interior. Al final, rociamos el exterior con un poco de aceite de oliva para ayudar a que se dore mejor.

Precalentamos el horno a 180ºC y colocamos el pollo relleno deshuesado en una bandeja adecuada para hornear. Es importante que en este paso, el pollo se cueza de manera uniforme y se empiece a dorar. Durante los primeros minutos, vigilamos atentamente para que no se queme y, cuando comience a tomar un color dorado atractivo, es el momento ideal para añadir un chorrito de vino blanco a la bandeja. Este toque de vino no solo le dará un sabor especial, sino que también ayudará a mantener la humedad en el pollo. A medida que se cocina, podemos rociar el pollo con sus propios jugos para asegurar que se mantenga jugoso.

Una vez que el pollo haya alcanzado ese dorado apetitoso, es hora de añadir un toque final con las Esencias de Tomillo y Romero Gallina Blanca. Espolvoreamos generosamente sobre el pollo ensalzando su sabor. Cuando las esencias comiencen a derretirse y liberar su aroma, es momento de rociar el pollo con la salsa resultante. Esto no solo añadirá un sabor fresco y aromático, sino que también ayudará a caramelizar la superficie del pollo. Dejamos que el pollo relleno deshuesado se cocine por unos cinco minutos más, permitiendo que los sabores se amalgamen perfectamente y que el pollo esté completamente cocido por dentro.

Para dar un giro especial a nuestra receta de pollo relleno deshuesado, se recomienda utilizar pollo de corral, ya que su carne es más sabrosa y tiene una textura más jugosa. Además, podemos experimentar con los ingredientes del relleno. Si preferimos, los orejones pueden ser sustituidos por ciruelas pasas, uvas pasas o incluso nueces, dependiendo de nuestros gustos y preferencias. Esto no solo brinda variedad, sino que también añade diferentes matices de sabor al plato final, asegurando que cada bocado de pollo relleno deshuesado sea un deleite.

Finalmente, una vez que nuestro pollo relleno deshuesado esté completamente cocido y dorado, lo sacamos del horno y lo dejamos reposar unos minutos antes de cortarlo. Esto permite que los jugos se distribuyan uniformemente por el pollo, haciendo que cada porción sea más jugosa y sabrosa. Al momento de servir, podemos acompañar el pollo con una guarnición de verduras asadas o una ensalada fresca para equilibrar los sabores. ¡Listo! Ahora podemos disfrutar de un delicioso y suculento pollo relleno deshuesado que seguramente hará las delicias de todos en la mesa!