El guiso de patatas con costillas adobadas es una opción deliciosa y fácil de preparar, perfecta para compartir en una comida familiar o una cena entre amigos. Este plato no solo destaca por su sabor reconfortante, sino que también es versátil en la cocina; puede servir como plato principal o acompañamiento, adaptándose a diferentes ocasiones y paladares. Con una combinación de ingredientes sencillos, es una receta que invita a ensuciarse las manos y disfrutar del arte de la cocina casera.

Originario de las tradiciones culinarias populares, el guiso de patatas con costillas adobadas ha conquistado los hogares de muchas culturas, convirtiéndose en un favorito de las mesas familiares. Su fama radica en la simplicidad de sus ingredientes, que se transforman en un manjar lleno de sabor a medida que se cocinan a fuego lento. Además, cada región le aporta su toque especial, convirtiéndolo en un plato que cuenta historias de la gastronomía local en cada bocado.

Información nutricional(por ración)

Energía

350 kcal

Hidratos

42 g

Grasas

5 g

Fibra

20 g

Proteínas

15 g

¿Cuántos comensales?
4
Patata
Patata
6 unidades mediana
Avecrem Pollo
1 pastilla
Vino blanco
Vino blanco
al gusto
Pimiento rojo
Pimiento rojo
1 unidad pequeño
Pimentón dulce
Pimentón dulce
1 cucharada de café
Ajo
Ajo
1 diente
Cebolla
Cebolla
1 unidad pequeña
Laurel
Laurel
1 hoja
Pimienta blanca molida
Pimienta blanca molida
al gusto
Sal
Sal
al gusto
Colorante alimenticio
Colorante alimenticio
al gusto
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Paso 1 de 10

Preparar las costillas adobadas

Comenzamos la receta de patatas con costillas adobadas cortando el costillar en trozos de tamaño adecuado. Es importante que cada pieza sea lo suficientemente grande para que mantenga su jugo y se mezclen bien los sabores en el guiso. Una buena medida sería realizar entre 8 y 10 cortes. Reservamos estas costillas adobadas para más adelante, garantizando que se impregnen de los sabores que iremos añadiendo a la cocción.

Paso 2 de 10

Sofreír la base

En una cazuela o olla, vertemos el aceite de oliva virgen extra suficiente para cubrir el fondo. Una vez el aceite esté caliente, incorporamos la cebolla y el ajo, que previamente rallamos para facilitar su integración en el guiso. A fuego medio-bajo, sofreímos hasta que la cebolla se vuelva transparente y comience a dorarse, lo que nos proporcionará una base sabrosa sobre la que se cocinarán las patatas con costillas adobadas.

Paso 3 de 10

Sellar las costillas y añadir el pimiento

Cuando la cebolla esté pochada, es el momento de añadir las costillas adobadas cortadas y el pimiento rojo, que previamente lavamos y cortamos en tres trozos. Salpimentamos al gusto y mezclamos bien para que los sabores se integren. A fuego medio, es fundamental dar unas vueltas a las costillas, sellándolas adecuadamente para resaltar su sabor. En este punto, el guiso empieza a tomar forma y a llenar la cocina de aromas deliciosos.

Paso 4 de 10

Incorporar el pimentón

Con la mezcla de costillas y pimiento ya en la cazuela, es hora de añadir el pimentón dulce. Revolvemos bien durante aproximadamente un minuto, asegurándonos de que el pimentón no se queme, ya que esto podría aportar un sabor amargo al guiso. Este paso es crucial, pues el pimentón es uno de los ingredientes claves que potenciarán el sabor de nuestras patatas con costilla adobada en el guiso.

Paso 5 de 10

Agregar caldo y vino

Ahora, desmenuzamos la pastilla de Avecrem caldo de pollo -30% de sal y la añadimos a la cazuela junto con el vino blanco. Ambos ingredientes ayudarán a darle profundidad al sabor del guiso. A fuego medio-bajo, dejamos que el líquido reduzca durante unos cuatro minutos, permitiendo que los sabores se concentren y que el guiso se vuelva mucho más sabroso. Esto es esencial para lograr que nuestras patatas con costillas adobadas tengan un sabor atractivo y delicioso.

Paso 6 de 10

Incorporar las patatas y alcachofas

Con el caldo ya reducido, es momento de añadir las patatas, que previamente hemos pelado y cortado en trozos. Also, añadimos las alcachofas, que pueden ser frescas o congeladas. Mezclamos todo bien para que las patatas queden impregnadas de los sabores del guiso. Finalmente, vertemos agua suficiente hasta cubrir todos los ingredientes. Es esencial que las patatas queden completamente sumergidas para que se cocinen de manera uniforme y adquieran el sabor de las costillas adobadas.

Paso 7 de 10

Condimentar el guiso

En este paso, agregamos la hoja de laurel, el comino en polvo y un poco de colorante alimenticio. Revolvemos todo con suavidad, asegurándonos de que los condimentos se distribuyan por todo el guiso. Luego, mantenemos a fuego medio y dejamos cocinar hasta que las patatas estén tiernas. Si es necesario, podemos bajar el fuego o añadir un poco más de agua con un toque de sal dependiendo del tipo de patatas que estemos utilizando, para evitar que se peguen.

Paso 8 de 10

Tiempo de cocción

El tiempo que permita cocinar el guiso es crucial para lograr un excelente resultado. Una vez que las patatas están tiernas, lo ideal sería servir este delicioso guiso caliente. Sin embargo, con el calor actual, es preferible dejarlo templar antes de servir. De esta manera, los sabores se asentarán aún más, y cada bocado de nuestras patatas con costillas adobadas será un verdadero placer para el paladar. Espero que disfruten mucho de este plato, ya que es uno de mis favoritos.

Paso 9 de 10

Variantes de costillas

Es importante mencionar que este guiso de patatas con costillas adobadas puede adaptarse utilizando costillas de cerdo o de ternera que no estén adobadas, aunque el sabor variará bastante. Las costillas que utilizamos son de León, reconocidas por su adobo especial que incluye pimentón ahumado y orégano, lo que las hace irresistibles. Sin embargo, para quienes buscan alternativas, también pueden encontrar opciones asequibles en el supermercado, que si bien tienen un aliño diferente, pueden funcionar bien en esta receta.

Paso 10 de 10

Servir y disfrutar

Finalmente, cuando el guiso esté listo y todos los sabores se hayan concentrado, es hora de servir. Acompañamos nuestras patatas con costilla adobada con un poco de pan para disfrutar de la salsa, que es realmente sabrosa. Este plato es una excelente opción para compartir en una comida familiar o entre amigos, creando un ambiente acogedor y lleno de sabor. ¡Que aproveche! Espero ver sus comentarios sobre cómo les ha quedado este guiso tan delicioso.

El guiso de patatas con costillas adobadas es una opción culinaria que combina sabores intensos y reconfortantes, convirtiendo cualquier comida en una experiencia placentera. Su preparación es sorprendentemente sencilla, lo que lo hace ideal tanto para días ajetreados como para reuniones familiares. Además, es un plato nutritivo que aporta energía y satisfacción, gracias a la mezcla de ingredientes que lo conforman. Este delicioso guiso no solo llena el estómago, sino que también abriga el alma, siendo perfecto para disfrutar en cualquier época del año.

La versatilidad del guiso de patatas con costillas adobadas permite adaptarlo a diversos paladares; puedes incorporar verduras de temporada o ajustar las especias al gusto de cada comensal. Atrévete a experimentar con nuevos ingredientes y descubre tu propia versión de este clásico. No dudes en explorar más recetas relacionadas en nuestra web y dejar volar tu creatividad en la cocina. ¡Tu paladar te lo agradecerá!

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