Para potenciar ese gusto o predilección de muchos niños por las albóndigas o para decidir a los que aún no los convence prueba hacerlas con queso.

Solo has de añadir un dado de queso tierno o una bolita de mozzarella al formar cada una de las albóndigas. Mejorarán en sabor y textura. Te quedarán irresistibles.

Valora esta receta
Añade este artículo a tus favoritos Y tenla a mano siempre que quieras
El truco ha sido copiado