Pues precisamente, esto es lo que no queremos que nos pase con las almejas de nuestra deliciosa receta de arroz a la marinera.
Para limpiar bien las almejas y que no quede ni rastro de arena, ¡aquí va un súper truco!
Sumerge las almejas en agua con sal y déjalas un buen rato para que se quite la arena de manera óptima.
Te recomiendo que hagas este truco antes de ponerte a cocinar. Así, cuando las queramos incorporar al arroz, ya no contendrán arena y podremos disfrutar de un delicioso arroz sin tener que estar pendientes por si se nos cuela algún que otro granito de arena.
Añade este artículo a tus favoritos
Y tenla a mano siempre que quieras
El truco ha sido copiado
Encuentra la receta que buscas
Te sugerimos...
No encontramos resultados para tu búsqueda.
Verifica la ortografía o prueba con una palabra diferente.
Filtrar
Tiempo
Nivel